El Pedraforca es una de las montañas más emblemáticas que se conocen. Su forma, las leyendas que la rodean y la larguísima tradición en escalada y excursionismo la han convertido en un referente del montañismo y la cultura popular. Su forma de horcadura con dos puntas redondeadas y casi perfectas y el hecho de no formar parte de ninguna cordillera, de "vivir" completamente sola, la convierten en un reclamo fotogénico. Tiene dos crestas paralelas, el Pollegó Superior (Picacho Superior), de 2506 metros de altitud, y el Pollegó Inferior, de 2.444 metros, unidos por la Horcadura, de 2.356 metros, con una “tartera” (un desnivel formado por piedras pequeñas) cada lado, la que cae hacia el pueblo de Saldes -al este- y la que va hacia Gósol -al oeste-, y aun tiene una cima secundaria pegado al Pollegó Superior, que es el Calderer, de 2.496 metros. La principal característica del macizo del Pedraforca es su complejidad geológica. Además, está declarado Paraje Natural de Interés Nacional y el entorno forma parte del Parque Natural del Cadí-Moixeró.

El Pedraforca es un icono del excursionismo, con itinerarios hasta las cimas que incluyen algún pequeño paso de trepada. Eso sí, hay que estar preparado físicamente, tener en consideración los posibles cambios meteorológicos e ir equipados adecuadamente. En cuanto a la escalada, se considera la Vía Estasen, abierta en 1928, como un referente que abrió muchas posibilidades. Las dificultades de la cara norte en invierno al Pedraforca eran comparables a algunas escaladas invernales en los Alpes. El refugio Lluís Estasen es un buen punto de partida para cualquier salida.

La mística de la montaña mágica, como se conoce también el Pedraforca, se sostiene en gran parte por las leyendas que lo vinculan a las brujas y a la noche de San Silvestre, la última del año. Son historias que hablan de aquelarres y que justifican la forma tan singular de la montaña. Y es que el Pedraforca es atractivo tanto de día como de noche. Con brujas o sin, la calidad del cielo de Saldes permite una oscuridad 30 veces superior al área metropolitana y se puede disfrutar a pelo o desde el recién estrenado Centro Astronómico del Pedraforca. El municipio ostenta el sello de Espacio con Cielo Nocturno de Calidad.

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